Los mercados cambian

No existen mercados inamovibles, que permanezcan inalterables a lo largo de los años, y ello obliga a productores, y a todos los actores del proceso comercial, a estar al día con estas variaciones para ir a la par con las preferencias de los consumidores. El futuro y las exigencias del mercado apuntan hacia una actividad que esté dispuesta a los cambios, con una instalación ganadera de fácil manipulación, que propicie la producción intensiva, de calidad y sostenible, y cuyos productos sean así mismo confiables y homogéneos. Alcanzar estas metas significará mantener a flote la rentabilidad y existencia de la producción ganadera.

Nuevos escenarios, nuevos retos

El futuro del mercado ganadero luce prometedor. Cada vez más se amplía la demanda de los productos bovinos, porcinos y vacunos, y este nuevo escenario implica nuevos retos para los cuales los productores deben estar preparados y no fracasar en el intento de adaptación. Uno de estos nuevos retos es el de la necesidad de optimizar la producción intensiva con economía de escala, que permita aumentar cada vez más la producción y que al mismo tiempo se reduzca el coste de cada producto que adquiere el consumidor. Mantener este equilibrio es uno de los principales retos del mercado futuro.

Instalación ganadera a tono con los tiempos

De igual manera, las continuas reformas en la legislación exigen cambios tanto en las instalaciones ganaderas como en los equipos del ámbito ganadero. Entre los puntos más importantes que la mayoría de esas reformas normativas contemplan se encuentran los referidos a la cuestión medioambiental y a la condición laboral de la mano de obra. El resguardar la higiene y la calidad del producto en cada una de las fases de producción, la disminución de los desechos, el hacer sostenible la producción ganadera y el asegurar el bienestar de los trabajadores con instalaciones ganaderas y equipos modernos, son exigencias mínimas del mercado que tarde o temprano toda empresa debe realizar.

El consumidor tiene la última palabra

La viabilidad a mediano y largo plazo de una empresa de producción ganadera depende de su capacidad de adaptación a los cambios. Y esos cambios futuros, como ya hemos mencionado, están encaminados hacia el producto, el medio ambiente y las condiciones de producción. Hay un aspecto adicional hacia el cual el mercado está dando cada vez mayor relevancia y es el derecho del consumidor a saber qué está comprando y cuáles fueron sus condiciones de elaboración. Para ello, las empresas ganaderas deben registrar y comunicar eficientemente la trazabilidad de los productos y ello contribuirá a crear una imagen confiable de la marca. El futuro del mercado es exigente y prometedor.